Nuestro trabajo en el huerto nos proporciona experiencias únicas, favoreciendo el aprendizaje de los niñ@s de una manera global.
Jugando, tocando, oliendo y cuidando con mimo nuestras hortalizas ayudará a que aprendan a valorar alimentos sanos que por su edad les cuesta aceptar.
Veamos que ocurre con Juan y Tolola